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  Padres jóvenes, primerizos, eligieron un hotel con comodidades que se ajusten al presupuesto docente/empleado del estado y ciertos lujos de la época para una pequeña familia.
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  Viaje familiar, sólo 3 aún. Yo tenía 2 años y medio.
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  Primer viaje familiar, con un bebé de poco más de un año, una niña de 3 y yo, de 7 años. Viaje en ómnibus de terminal a terminal, conexiones y alojamientos arreglados en el mismo sitio por los adultos, quienes era un grupo de amigos, con niños pequeños de similar edad.
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        Familia conformada con niños pequeños que ya habían conocido por primera vez el mar, decidió conocer también la nieve. En esta ciudad vive la mejor amiga de mamá y madrina de uno de los niños, con sus hijos de edades similares, por lo que era una reunión de familias después de varios años sin verse. - 
  
  Vacaciones familiares de verano, en camping. Como niños, nos gustaba la aventura, y a mis padres, aún les agradaba el tipo de viaje, lo que cambiaría con los años.
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  Viaje con abuelos maternos. Primer viaje lejos de mis padres, pero con quienes me criaron. Tenía 8 años y muchas ganas de viajar con ellos en auto y tren.
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  Vacaciones de verano familiares, esta vez en cabañas, nuevamente con una familia de amigos.
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  Vacaciones familiares, comprados a través de un tour armado por una agencia de viajes local. La familia ya se componía de una pre adolescente de 12, una niña de 8 y un niño de 6, por lo que era necesario mayor detalle y cuidado de las característics del viaje.
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        Surgió como una excursión familiar en un domingo sin planes, con mucho frío. Decidimos tomar un pequeño viaje de unas horas (80km) a Empedrado, en la provincia de Corrientes, para un almuerzo típico y una tarde frente al río, admirando las barrancas. - 
  
  Primer viaje escolar, a los 13 años. Colegio religioso, exclusivamente para niñas, llevó numerosas reuniones de padres y largas decisiones e cuanto a empresa, cuidados, y personal que acompañaría desde el colegio y la agencia.
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        Viaje familiar a visitar a la mejor amiga de mamá, con su familia. El disfrute fue mayor ya que éramos mayores entre primos y hubo mayor independencia para los grandes de disfrutar. - 
  
  Campamento del grupo juvenil de la Iglesia. La logística fue enteramente armada por los jóvenes adultos a cargo de los grupos: alquiler del coche, el camping, las donaciones y las reuniones de padres.
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        Segundo campamento juvenil del grupo religioso. Las expectativas ya eran mucho mayores y confiables, al haber tenido una buena experiencia anterior. - 
  
  
        Viaje familiar relámpago de Semana Santa, ya que nuca habíamos ido juntos a Buenos Aires, sino siempre por separado y con abuelos. - 
  
  
        Viaje de egresados. El mismo se había comenzado a planear un año antes, pero al momento no tenía intención de ir, ya que mis amigas más cercanas no iban. En Febrero de 2008, decidí que sí quería ir, y lo pude lograr. - 
  
  
        Ya sin el abuelo materno, mi mamá y mi tío quisieron mostrarnos cómo eran sus vacaciones de verano en familia cuando eran pequeños, y nos llevaron a la familia entera con la abuela a recorrer Cosquin, Tanti, Los Cocos y Carlos Paz en auto. - 
  
  
        Mi abuela materna comenzó a frecuentar grupos de jubilados de PAMI, los cuales ofrecían viajes a bajo costo gracias a alianzas con agencias locales, y en 2009 fue mi turno de acompañar a Salta. - 
  
  
        Encuentro de Animadores del Norte del país del Movimiento Juvenil de la iglesia. Un evento multitudinario, en una ciudad que no conocía del todo, y a compartir con gente desconocida por días. En estos casos, el lujo no era tenido en cuenta, como por ejemplo los asientos del ómnibus o un hotel céntrico. - 
  
  
        Viaje relámpago con una amiga a acompañar a un amigo que se convertiría en sacerdote. El viaje no tuvo alojamiento, ya que fuimos en ómnibus, caminamos por Posadas y por la tarde tomamos el transporte local al lugar del evento. Al finalizar el mismo, volvimos a la Terminal, a esperar el ómnibus de regreso por la madrugada. - 
  
  Primer viaje solas con mi hermana menor a Buenos Aires, a ver un recital de una artista internacional. Mamá nos ayudó a gestionar todo a través de una agencia de viajes, incluidas las entradas y un transfer desde el estadio al hotel al finalizar el evento.
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        Luego de la visita en San Nicolás, paramos en Rosario, a conocer y a ver un partido de Los Pumas (rugby). - 
  
  
        Viaje familiar de verano, a una ciudad (en ese momento) pequeña, a la que mis padres había ido el verano anterior y de la que se habían enamorado. Fuimos gestionados por un tour operador, con hotel incluido. - 
  
  
        Viaje express familiar a visitar a un sacerdote amigo que había sido recientemente trasladado y era muy apreciado por todos. Otro viaje en auto, como la gran mayoría. - 
  
  
        Viaje entre amigas a una playa en el río Paraná, cruzando en transporte público y caminando hacia los campings en pleno verano. - 
  
  Viaje express familiar
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        Primer viaje grande entre amigas, totalmente organizado y pagado por nosotras. - 
  
  Entre 2013 y 2016, especialmente entre Septiembre y Diciembre de dichos años, trabajé para una agencia de viajes que operaba viajes de egresados primarios y secundarios a Córdoba. Los viajes duraban un promedio de una semana, y al llegar de uno, podían pasar entre tres horas a una semana antes de subir a otro.
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        Viaje a un nuevo recital, esta vez sola y coordinando con una conocida en redes para compartir habitación de hotel y reducir costos. - 
  
  
        Viaje de vacaciones de verano en familia a nuestro lugar favorito. - 
  
  
        Nuevo concierto con mi hermana, de los más esperados y arriesgados para llegar e ingresar, pero que fue organizado por nosotras mismas desde hacía un año. - 
  
  
        Viaje para pasar una semana en casa de una amiga que había conocido hacía algunos años en internet y se convirtió en una gran amistad. - 
  
  
        Viaje relámpago en familia para celebrar el fin de semana extra largo en el que cumplía años mi hermana menor. Comenzó siendo un viaje a Asunción del Paraguay, luego se movió a Córdoba o Buenos Aires, para luego decidir que en cuanto a dinero, el costo y la distancia eran iguales, por lo que fuimos 2 noches a Brasil. - 
  
  
        Nuevo concierto con mi hermana, donde quedábamos aún en hoteles pero armábamos todo nosotras, y nos movíamos en transporte público, ya sin necesidad de transfers. - 
  
  
        Nuevo viaje entre amigas, esta vez incluyendo a las más chicas del grupo, y a mi hermano menor, muy allegado a nosotras. - 
  
  Viaje de Semana Santa en familia
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        Viaje entre amigas de distintos grupos y mi hermana, para ver un concierto de una banda de nuestra adolescencia. - 
  
  
        Un viaje familiar, pensado desde un momento difícil en la familia. Parte de las fiestas se pasarían fuera de las tradiciones por primera vez y decidimos pasarlo juntos en un destino en el que la celebración fuera un acontecimiento sin igual. Recorrimos más de 2000km en auto, la forma preferida por todos, base del inicio de todos nuestros viajes.
El paso fronterizo de Foz do Iguacu, al ser Mercosur, fue sólo con DNI, rellenando las visas temporales a entregar al regreso (Santo Tomé) - 
  
  
        Desde Río de Janeiro, dividimos nuestro viaje para poder pasar unos días en nuestro lugar favorito: Torres. Finalizar vacaciones en esa ciudad es efectivamente producto de la decisión de sentirse como en casa y del verdadero descanso desde una metrópoli ta grande hacia el sur brasilero en una ciudad pequeña y acogedora. - 
  
  
        Otro viaje a un concierto con mi hermana y otras amigas de otros puntos del país, con el que acordamos coincidir para este evento. - 
  
  
        Vacaciones de verano familiares, esta vez en avión. Fuimos en auto hasta Foz do Iguacu, lo dejamos en un estacionamiento pago y fuimos en avió haciendo escala en el aeropuerto de Guarulhos en Sao Paulo, de las conexiones más caóticas. - 
  
  
        Y nuestras vacaciones no podían terminar sin ir a nuestro lugar preferido. El vuelo de cabotaje fue SDU en Rio, hasta POA en Porto Alegre. Desde allí tomamos un minibus de aproximadamente 2 horas hasta Torres. - 
  
  
        Nuevo concierto con mi hermana. En este viaje, se unió el resto de la familia. - 
  
  
        Una nueva visita a la mejor amiga de mamá, con los hijos mucho más grandes. Las actividades y las salidas eran más separadas entre adultos y los jóvenes, y la organización monetaria también más holgada, ya que éramos más quienes aportábamos. - 
  
  
        Viaje de un mes a Buenos Aires, con el dinero justo, y hospedada por una amiga. Fui a desempeñarme como Voluntaria en los Juegos Olímpicos de la Juventud. Los detalles del "cómo" no importaron tanto como la experiencia, ya que mi motivación estaba en los Juegos y la independencia que me daba. - 
  
  
        Base en la que dejaríamos el auto antes de partir hacia Europa. Quedamos una noche en un hotel. - 
  
  
        El viaje soñado. El mismo fue enteramente planeado y organizado por mí. Desde los vuelos, hasta los alojamientos (en Londres quedamos en un departamento alquilado), las conexiones y los seguros obligatorios. Fuimos en época de fiestas y pleno invierno, y la ciudad seguía igual de abarrotada. - 
  
  
        Utilizamos el Eurostar train y atravesamos el túnel después de 10 días en Londres. Aquí quedamos en un apart hotel muy parisino. - 
  
  
        Otra de las ciudades parte del sueño europeo. Fuimos en un vuelo corto desde París, y quedamos en un apart hotel dentro de un condominio. Caminamos toda la ciudad y comimos toda la gastronomía local que pudimos. Una ciudad de la que esperamos modernidad, pero nos sorprendió para bien con tanta historia. - 
  
  
        Un vuelo corto desde Roma y un guesthouse en pleno Eixample. Una ciudad a la que fuimos "para conocer" y de la que nos enamoramos profundamente. Desde aquí, volvimos a casa. - 
  
  
        Un recital nuevamente, uno al que soñaba ir desde que tenía 7 años. En esta época, el Covid era sólo una pareja en cuarentena en otra ciudad, pero ya existían rumores de que era algo mayor. Una semana luego de esta foto, inició la primer cuarentena. - 
  
  
        Luego de un encierro bastante largo, mis vacaciones no iban a coincidir con el resto de la familia, por lo que decidí emprender un viaje a una de las zonas del país a la que no iba hace mucho, pero que despertó mi curiosidad gracias a un documental de viaje en moto de uno de mis actores preferidos (Ewan McGregor, "Long Way" series). A último momento, mi mamá se acompló, y juntas cumplimos el sueño de subir al Tren de las Nubes. - 
  
  
        Primeras vacaciones de trabajo oficiales de mi hermano menor, decidió pasarlas con sus hermanas mayores, por lo que fuimos una semana entera a Buenos Aires, a acompañar cada lugar que quería conocer. - 
  
  
        Un nuevo recital, y unos días en Buenos Aires con mi hermana. Esta vez, agregamos un día de compras en Flores. - 
  
  
        Una de mis mejores amigas tenía un congreso de veterinaria en Foz, y quería alguien que la acompañe en la ruta mientras manejaba, así que me uní. Nos conocemos desde muy niñas, así que el prospecto de viajar juntas y tomar mates como adultas era un paso en el crecimiento de nuestra amistad. Aquí me encargué de la logística del alojamiento y el gps. - 
  
  
        Últimas vacaciones hechas en familia hasta el momento, a nuestro lugar preferido. Después de un largo tiempo, las vacaciones de trabajo coincidieron, y fue posible este viaje en auto, en una casa alquilada. - 
  
  
        En mi trabajo nuevo, coincidieron mis días de descanso con un fin de semana largo, por lo que decidí tomarme unos días. En un principio, iba a ir a Foz do Iguacu, pero luego de hacer números, decidí ir hacia otro lado, y organizamos este viaje express con papá. - 
  
  
        Viaje todo pago por trabajo, a conocer al equipo. - 
  
  
        Nuevo concierto con mi hermana, viaje al que volvió a sumarse mi hermano menor. Visitamos una amiga de la familia también, y tomamos unos días de recorrido. - 
  
  
        Mi hermana asistía a un concierto, y me tomé unos días para acompañarla y también visitar la casa nueva de una amiga, y a otra que estaba pronta a ser mamá. - 
  
  
        Como mis vacaciones de trabajo no coincidían con las de nadie más, decidí planear mi viaje a mi ciudad favorita en uno de los viajes más lejanos, sola. Lo planeé todo por mi cuenta e hice un gran uso de mis habilidades en portugués y gestión turística.