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Se atribuye a Moisés la escritura de los primeros cinco libros de la Biblia (el Pentateuco o Torá). Moisés actúa como vocero directo de Jehová, estableciendo la base del derecho hebreo escrito, el cual contiene un sistema completo de leyes civiles, éticas y religiosas para la convivencia del pueblo. -
Palestina pasa por dominios persas y griegos. A pesar de las conquistas, el pueblo judío mantiene su identidad basada en la Biblia y la Ley, que durante siglos ha servido como fuente de inspiración de justicia y moral. -
El emperador Tito toma Jerusalén, destruye el templo y provoca la dispersión de los judíos (La Diáspora). Al dejar de tener una patria física, surge la necesidad vital de anotar la "ley oral" (que complementaba a la escrita) para que no se debilitara en la memoria del pueblo, dando paso a la creación de la Mishná. -
A los 40 años, Mahoma recibe la primera revelación de Dios a través del Arcángel Gabriel. Este evento marca el inicio de la transmisión del Corán, la fuente principal y absoluta del derecho musulmán, que contiene directrices tanto espirituales como legales. -
En Japón, durante los periodos Asuka y Nara, se introducen el Budismo y el Confucianismo. El príncipe Shotoku intenta establecer una constitución basada en estas filosofías, resultando en reformas y el código Ritsuyo, mostrando una temprana mezcla de moral religiosa y orden legal. -
Surgen diversas escuelas que interpretan las fuentes del derecho (Corán y Sunna) de manera distinta. Se consolidan el consenso de los juristas (lÿma) y la analogía (Qiyás) como fuentes secundarias para llenar vacíos legales, demostrando la capacidad del derecho musulmán de adaptarse a su tiempo. -
Japón promulga una Constitución tras siglos de aislamiento. Se separan oficialmente el Budismo y el Sintoísmo, estableciendo a este último como la base ideológica de las normas imperiales, vinculando nuevamente la estructura legal con la tradición religiosa nativa.