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Lugar de Nacimiento: Los Mochis, Sinaloa.
Hora de nacimiento: 17:01 Después de un embarazo difícil, llegó la hora del alumbramiento, que fue bastante sencillo y rápido. Una bebé de casi 4 kilos nació, sana. Datos extra: Nací con manchas de nacimiento en todo el cuerpo, las enfermeras pensaban que era caquita seca. Una prima nació el día anterior y mi tía pensó que mi mamá la iba a visitar, y sorpresa, era yo. -
Mis primeros años de vida los pase en Sinaloa, de lo poco que recuerdo, es andar bastante en un triciclo, dando vueltas mientras cantaba la canción de "Marieta", pasear con mi papá antes de que se vaya a trabajar y el árbol de guayabas de enfrente. La curiosidad siempre me caracterizo, "cochina" (cocina) al parecer era de mis palabras favoritas. -
Llegué a Mexicali en el 2003, y mientras esperaba al siguiente año para entrar al Kinder, me enseñaban a leer y algunas cosas básicas más. Aprendí a convivir con otros niños, que hay niños que son malos por ser malos. Una anécdota curiosa es que una vez estaba coloreando con un color anaranjado, un niño lo rayó con otro anaranjado y me enoje porque se notaba la diferencia de tonos. Enfrente la perdida de dientes de leche, casi no sonreía por eso, esta foto fue antes de perder los frontales. -
Aprendí lo básico, sobre todo la lectura, que es lo que más ame y me marcó en toda mi vida. El bullying, sobre todo por mi forma de hablar y mi apariencia física. No tuve mucho apego a mis compañeros por el trato que me daban, pero aprendí lo que era la amistad, convivir con personas y además de aprender las cosas básicas de la escuela, del pensamiento, aunque a veces llegaba a fallar (y llega a fallar). El desarrollo motriz, fallaba, en ocasiones, quemándome, como se puede ver en la foto. -
Jugué en un equipo de voleibol en sexto de primaria. Era más individual, por gustos personales que empecé a desarrollar y por un rechazo de los demás. No siendo hasta la secundaria, medio año después, que conseguí buenas amistades que sigo manteniendo y comencé a experimentar los cambios propios de la preadolescencia, además del gusto por la escritura. Nunca fui fan de los deportes y actividades físicas por vergüenza y el bullying, pero el voleibol siempre me gusto, pero me encaminé a las artes. -
Tuve mi primer periodo antes de cumplir los 15 años, pase de medir 149 a 159, y de ahí no crecí más. Siendo sincera, nunca note demasiados cambios en mi físico, donde si hubo demasiados cambios fue en lo mental. Mi forma de pensar cambio, supe que era diferente, pero nunca lo exprese, porque era algo que no entendía, pero yo lo notaba; mi tiempo en internet y mis amistades me hicieron ver el mundo de una manera distinta, me moldearon a ser lo que soy ahora y conocer otras cosas. -
Descubrí que era asexual. Con mis amigos de la prepa descubrí muchas cosas, ellos me hicieron bajar barreras que tenía arriba, y aunque no fui protagonista, pude ver lo duro de las relaciones y lo peligroso que pueden llegar a ser esos sentimientos. Mi noviazgo fue por internet, pero fue muy linda y también me proporciono cosas buenas.
A mis amigos y a mí nos unen los problemas familiares y nuestros gustos, aprendimos a apoyarnos a falta de apoyo parental, además de pensar serios en el futuro. -
Entré a la universidad en el 2018, teniendo que viajar a Tijuana para estudiar. Fue un momento difícil, estar en una ciudad que desconocía, enfrentar esos momentos por mí misma. Ame lo que estaba aprendiendo, las experiencias eran nuevas e increíbles, pero siempre me cuestionaba. Cuando entró la pandemia descubrí que tenía SOP e hipotiroidismo, entré en depresión y dejé la universidad para poder centrarme en mi y mejorar. -
Me encuentro cursando la adultez temprana. Si he notado un cambio notable en lo mental, hay cosas a las que le tomó importancia y que antes no, valoro y comprendo el valor de las cosas, como el tiempo, no me gusta hacer perder el tiempo ni que yo lo pierda. A pesar de dudar un poco aún sobre el futuro, hay cosas sobre las que estoy firme. Supongo que queda conocer a alguien con quien enamorarme y ser una pareja. -
¿Cómo me veo? No lo sé, no me veo más allá de los 31, pero supongo que trabajando, ejerciendo mi profesión, con uno o dos libros publicados y trabajando en más, dando conferencias, educando a las personas. Casa propia, amando a mis gatos, porque sé que los que ya tengo para ese entonces no van a estar. Supongo que aquí ya estaré más estable con mi pareja, como no pienso parir, tal vez ya tengamos adoptados a todos o algunos de nuestros niños -
Pienso trabajar hasta más no poder, educando, educándome, escribiendo y publicando libros. Haciendo conferencias tal vez. Tendré cuidado porque ya soy vieja, no sabemos que tan delicada pueda estar o que tanta movilidad vaya a tener, pero aprovecharé las redes sociales para promocionarme. Además de hacerme cargo de mis niños, o ellos comenzando a hacerse cargo de mí, pero lo esencial, sería yo cuidar de ellos y apoyarlos en lo que necesiten. -
Espero estar retirada, hacerme cargo de mis gatos, mis cosas, tal vez plantas, tal vez tejer, seguir escribiendo hasta que mis dedos y mi mente deteriorada puedan. Mis hijos ya estarían grandes, mis nietos tal vez me vengan a visitar y cuide de ellos, transmitiéndoles mis conocimientos y las cosas que viví. -
Una vejez avanzada, tener una vida tranquila, sentarme en el patio o cerca de una ventana y ver a las personas pasar, saludar vecinos y conversar con ellos. Jugar con mis gatos, vivir la vida con calma y mucho amor. Con mi familia, no lo sé, he agregado las cosas de la familia a último momento, porque nunca me he visto con una, pero haría lo que pudiera si la tengo, cuidarla y hacer lo posible para tenerla feliz y lo más sana posible. -
Tuve una muerte pacífica. En el epitafio y carta puse que estaba casa, pero siendo sincera, nunca me he visto con pareja y nunca ha sido una preocupación para mí. Deseo tener una muerte pacifica y mucho amor para mis futuros gatos, a los que ya no podré cuidar nunca más, al menos no físicamente. Todo estará en orden y nadie se peleará por mis cosas... al menos eso espero.