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Nada y mucho
En esta misma época y pese a su juventud, empieza a frecuentar las sociedades musicales, germen de las futuras sociedades filarmónicas y orquestas en donde comienza a representar y a componer sus primeras obras por las que es reconocido y admirado. Es en este ambiente cuando a los once años compondrá el octeto Nada y mucho (1817), para trompa, cuerda, guitarra y piano. A esta composición seguirán otras en la misma línea, hasta que finalmente se decida, con trece años, emprender nuevas obras. -
'Medea', 'Edipo Rey' y 'Antígona'
El Teatro Arriaga programa este fin de semana 'Medea', 'Edipo Rey' y 'Antígona' Según han explicado desde el Arriaga, esta función triple de obras griegas forma parte de un proyecto teatral que recibe el nombre de Teatro de la Ciudad, una iniciativa conjunta de los directores Andrés Lima, Alfredo Sanzol y Miguel del Arco concebida como "una apuesta por la investigación, reflexión, producción y exhibición escénica". -
Los esclavos felices
La compañía que representó esta primera producción de “Los esclavos felices” era la misma que visitaba el Bilbao natal del compositor en sus temporadas de ópera, de modo que la nueva versión musical de Arriaga se refería a este precedente.
Años después, ya durante su estancia en París, y poco antes de su fallecimiento (debido a una tuberculosis, que lo llevó a la tumba con sólo 19 años de edad), Arriaga compuso una obertura pastoral para la ópera, que es además lo único que se ha conservado. -
Variaciones sobre el tema de “la Húngara”
La obra Variaciones sobre el tema de “la Húngara”,
op. 22, para violín y acompañamiento de bajo ad libitum. Por las referencias que existen de diversas cartas del famoso violinista italiano Francesco María Vaccari, instalado en Madrid como músico de la Casa Real de Fernando VII dirigidas a la familia Arriaga, esta nueva obra de Juan Crisóstomo era de corte
clásico y respondía a un buen conocimiento de la técnica del violín y a ideas musicales muy claras. -
Variaciones
Las Variaciones que había escrito en Bilbao. La realizó por indicación de Vaccari y para complacer a Fernando VII, a quienes no les gustaban tañidos a solo, están escritas para violín solista con acompañamiento de un segundo violín, viola y violonchelo, lo que en París se llamaba “quatour brillant”, en contraposición con los “quatours concertants”. La tenacidad en sus esfuerzos y su lucha infatigable por aprender y mejorar en su actividad musical, hicieron que él mismo se convirtiera. -
Stabat Mater
Otra parte importante de su producción es la que corresponde a obras para voz y orquesta, que comprende arias, cantatas y música religiosa, y entre las que se destacaría el Stabat Mater para dos tenores, bajos y orquesta. -
Tres Estudios para Piano
El autor escribió asimismo algunas pequeñas piezas, entre ellas los Tres Estudios para Piano de inmejorable construcción; en el primero de ellos se pueden encontrar fragmentos de hondo sentido romántico y sincopados que recuerdan a la música de Schumann, y el segundo tiene acordes y enlaces utilizados veinte años después por César Franck en su Preludio, Coral y Fuga. -
"O salutaris hostia"
Partitura manuscrita probablemente por M. Serrano
Partitura para tenor 1, tenor 2 y bajo y quinteto de cuerda: violin 1, violin 2, viola, violoncelo y contrabajo. -
Tres cuartetos
Son una colección de tres cuartetos para dos violines, viola y violoncello compuestos en 1823, cuando el compositor solamente tenía dieciséis años de edad. Pueden ser consideradas las obras más destacadas de su producción.Esta primera edición fue realizada por parte de Casa Pétit, conteniendo las particellas editadas por Juan Crisóstomo aunque sin fechar, y tan sólo los datos del lugar e impresor. -
Gran sinfonía en Re m
La obra está estructurada en cuatro movimientos heterogéneos y de gran coherencia interna. El primero consta de un adagio introductorio (4/4) de 35 compases, que conduce a un allegro vivace (2/2) mediante un pasaje accelerando . El andante que conforma el segundo movimiento de la sinfonía tiene una estructura en forma sonata y está escrito en un inusual La Mayor – como se ha expuesto en el párrafo anterior -. El tercer movimiento, Menuetto-Allegro , está escrito en forma ternaria.